Tras la triste noticia del fallecimiento de Robin Williams que nos dejó a la edad de 63 años, me puse a repasar algunas de las películas del actor. Algunas ya las había visto y otras no. Good Morning, Vietnam no lo había visto y resultó ser una grata sorpresa.

Barry Levinson es un consagrado director americano del cual podríamos decir que consiguió más éxito en sus inicios que en estos últimos años. En sus primeros años obtuvo varias nominaciones a los Oscar y nos dejó buenas películas como El secreto de la pirámide (1985), Good morning, Vietnam (1987) o Rain Man (1988) entre otras. Más adelante dirigió películas como Acoso (1994), Esfera (1998) o Algo pasa en Hollywood (2008) de menor éxito. Actualmente dentro de poco estrenará The Humbling con Al Pacino.

El guión de Good Morning. Vietnam es de Mitch Markowitz que colaboró en un par de episodios de la serie M.A.S.H. quizás por eso podemos apreciar el enfoque cómico que se quiere dar a la guerra del Vietnam. Good Morning, Vietnam está basada en hechos reales y narra la historia de Adrian Cronauer un famoso pinchadiscos que llega en 1965 a Saigón en plena Guerra del Vietnam para subir la moral de las tropas con su disparatados y mordaces monólogos políticamente incorrectos que no dejarán títere sin cabeza. El guión de la película se centra en las situaciones que rodean al locutor Cronauer y en torno a él se irán generando varias subtramas, como su amor imposible por la vietnamita Trinh, la relación con Tuan el hermano de esta, con sorpresa final incluida, o la relación de Cronauer con sus superiores que no son de la opinión de compartir toda la información con las tropas.

Desde luego no puedo recomendar la película a los que no les guste la exageración verbal y gestual ya que Robin Williams desde la primera secuencia demuestra sus grandes dotes de cómico. Personalmente si me gustaba este actor y en mi humilde opinion nos deja una actuación soberbia. Un locutor que no creo deje a nadie indiferente. Aprovecharemos para repasar algunas de las películas en la prolífica trayectoria de Robin Williams. El actor comenzó en varios shows de TV y más adelante interpretó a Popeye (1980). Entre sus trabajos más destacados podemos mencionar, a parte de Good Morning, Vietnam (1987), al inolvidable profesor John Keating de El club de los poetas muertos (1989), Despertares (1990), Hook (1991), Jumanji (1995), Una jaula de grillos (1996), o su papel en El indomable Will Hunting (1997) con el que ganó su único Oscar. Del siglo XXI me cuesta más recuperar alguna película que sea destacable pero mencionaremos Retratos de una obsesión (2002) o Noche en el museo (2006). Curiosamente la tercera parte de esta última, Noche en el museo: El secreto del faraón, se estrenará a finales de Diciembre y los fans de esta saga podrán ver el último trabajo del actor.

Entre el reparto destacar a un correcto Forest Whitaker interpretando al soldado de primera clase Edward Garlick el primero en saludar a Cronauer y su asistente de radio. El teniente Steven Hauk interpretado por Bruno Kirby (Cuando Harry encontró a Sally…, El Padrino 2) en una papel muy divertido dando vida a un teniente que se cree gracioso y no lo es. Del resto del reparto mencionar a los dos personajes vietnamitas, Tuan y Trinh, interpretados correctamente. Sorprende ver a los vietnamitas en una película americana con un enfoque humano y no sólo como charlies. Por último el férreo Sargento Mayor Dickerson interpretado por J. T. Walsh.

Al ser rodado casi todo en el interior no destaca en demasía la fotografía aunque si podemos atisbar algunas imágenes de la villa vietnamita o algún que otro momento. Barry Levinson maneja perfectamente a los actores y crea una película que se hace amena y divertida. Te tendrá entretenido y sacará alguna que otra sonrisa en sus dos horas de duración. Si bien es cierto que en algún momento decae el ritmo de la narración y que puede que alguna subtrama resulte menos interesante como la historia de amor que se ve desde el principio que no lleva a ningún sitio. O por el contrario se desaproveche alguna otra trama más interesante como la del vietnamita Tuan que es muy interesante pero te queda sensación de que se podía haber sacado más partido.

De lo que no cabe duda es de su excelente banda sonora con The Beach Boys, unos clásicos para este tipo de películas, así como Wilson Pickett, Louis Armstrong, The Rivieras, The Marvelettes, Martha Reeves & The Vandellas, The Searchers y Jefferson Airplanes entre otros se presenta inconmensurable reuniendo casi todos los grandes éxitos de los 60 y los 70 de la música de la Motown.

Pese a ser una película bélica y tener un par de escenas de acción no sé escuchará ningún disparo. Curiosamente se estrenó el mismo año que La chaqueta metálica de Stanley Kubrick, nada que ver una película con otra. Para ser una película de finales de los 80 el tiempo no la ha castigado tanto y recomiendo verla. Muchos de los monólogos de Robin Williams fueron improvisados, el director Barry Levinson tuvo el acierto de dejarle frente a la cámara y dar vía libre a sus enérgicos arrebatos. Merece la pena verla aunque sea sólo por oírle decir…

¡Goooooooooood Moooorning, Vietnam!

Premios

1987: Nominada al Oscar: Mejor actor (Robin Williams)
1988: BAFTA: Nominada Mejor actor (Robin Williams) y sonido

BSO 8
Fotografía 5
Interpretación 8
Guion 6
Dirección 7
Satisfacción 7

Título original: Good Morning, Vietnam
Año: 1987
Duración: 121 min.
País: Estados Unidos
Director: Barry Levinson
Guión: Mitch Markowitz
Música: Alex North
Fotografía: Peter Sova
Reparto: Robin Williams, Forest Whitaker, Bruno Kirby, Robert Wuhl, Noble Willingham, Tung Than Tran, J.T. Walsh
Productora: Touchstone Pictures / Silver Screen Partners III
Género: Comedia. Drama. Bélico | Comedia dramática. Guerra de Vietnam. Radio

Sinopsis: Vietnam. 1965. Un pinchadiscos de la radio, Adrian Cronauer, es enviado a Saigón para trabajar en la emisora del ejército norteamericano. En contraste con sus aburridos antecesores, Cronauer es pura dinamita: sus comentarios irreverentes, tacos, improperios y sus críticas al vicepresidente le hacen ganarse el aprecio de las tropas. Sin embargo, su superior, el teniente Hauk, no es de la misma opinión.